Y ENTONCES TE SIENTES MENOS SOLA Y MÁS PROTEGIDA, ES CURIOSO ¿NO?
No sé por donde empezar, demasiadas ideas rondan mi cabeza, demasiados descubrimientos, demasiadas sensaciones nuevas, demasiadas incognitas me invaden y es complicado, como todo en la vida, esa es la cuestión, que la vida no es fácil y yo me quedé estancada en la infancia, allí sigo atrapada cobijada en el País de Nunca Jamás, esperando a vivir una infancia feliz y plena para seguir adelante, eso es lo que llevo haciendo todo este tiempo, ahora me estoy dando cuenta de que no puedo seguir allí por siempre jamás. Por mucho que me desagrade, por poco que me guste tengo que seguir y vivir mi adolescencia como una adolescente; mi juventud como una joven; y mi madurez como eso, como una mujer madura, responsable y responsable para con ella y los suyos. Sin embargo, si bien es fácil decirlo, es complicado hacerlo, porque yo sigo ahí, en la infancia, esperando que los Reyes Magos me traigan ese N98 del que me he enamorado, pero que sé que no nos podemos permitir; sigo siendo la niña que espera que su madre se siente con ella al verla triste y le diga "eh, porqué estas triste, cuenta, ya verás como todo cambia, solo hay que tener paciencia, con el tiempo todo se ve diferente"; sigo esperando una voz orgullosa, fuerte y grave que no se canse de decir lo orgulloso que está de su hija; sigo ahí, sentada, mientras oigo insultos esperando oir una voz fraternal que diga " eh, a mi hermana ni la nombres, no vuelvas a insultarla jamás, vete"; sigo esperando cual cenicienta que al llegar a palacio este esté lleno de flores, rociado de globos de colores, y todo envolviendo una bonita cena mientras suena de fondo esa música que me descubrió hace años. El problema es que lo sigo esperando de verdad, estoy ahí, en el Pais de Nunca Jamás esperando que todo esto ocurra, esperando, esperando .... ese es mi problema, siempre espero algo de los demás, siempre. Y es que ellos no tienen la culpa de nada, ni mi familia, ni las que fueron mis amistades, nadie. Cada uno es como es, a su manera. Y mi familia me quiere, y me cuida; y los que fueron mis amigos en su momento también me apreciaron, fui yo la que, creyendo que tenían que darme "algo" lo echó todo a perder. Ya está, esta es la historia de mi vida. Sin saber cómo todo se ha resuelto, mi gran pregunta, mi preocupante PORQUE? Ya está contestado : Porque sigo siendo una niña, con su inocencia, sus espectativas y sus sueños. Sigo ahí, esperando, como una niña espera la llegada de la navidad, de su cumpleaños... Y está claro que ese tiempo ya pasó y tengo que admitirlo, y tengo que asumirlo. Quizás ha sido el ver a mi hija cómo baila ante el espejo creyendo que nadie la veía con esa ilusión, esa sonrisa feliz, esa mirada llena de ilusión mientras imagina que es la bailarina de HSM; o el poder estar media hora en la cama con el pequeño jugando, riendo, simplemente estando. No sé lo que ha sido, solo sé que mi problema es que sigo ahí, esperando, por eso todo son frustraciones, desengaños, desilusiones. Por eso he decidido dejar de esperar. Seguir caminando, caminando por la que fueran mi adolescencia y juventud llenas de estados de ánimos radicales. Hasta llegar a mis 30 años, a mis hijos, a mi familia, a mi trabajo, a mi hipoteca, y asumir que por mucho que lo desee jamás podré volver a ser esa niña simpatica y risueña a la que todos sonreían y que nunca se cansó de esperar. Mis padres tuvieron demasiados desengaños para prestar atención a los míos, mi hermana tenía su propia vida que forjar, mis amistades tenía sus cosas ... No he sido egocentrica, ni me he sentido especia, simplemente he seguido siendo una niña.
Y cuando con 30 años una sigue esperando al final llora por todo, y eso no puede pasar.
Durante todo este tiempo al no tener lo que yo creía que me tenían que dar me he maltratado, y lo he hecho comiendo, o devolviendo. Comiendo cosas que no debía, que sabía que me hacían daño a mí y a mi físico me maltrataba, en otras ocasiones, las menos, me autolesionaba incluso. Hoy me he dado cuenta de que no soy una persona torpe, sino que no cuido de mí misma, de hecho cuando me veo las piernas llenas de moratones por golpes que me doy me siento más tranquila porque es como si recibiera mi castigo por ser así, por ser incapaz de seguir. Pero de eso me he dado cuenta hoy.
Se acabo el esperar. Se terminó, no sé cómo lo haré, pero tengo que dejar a esa niña regordeta y sonriente allí, al pie del arbol de navidad esperando esos regalos que no llegaban porque "ya lo sabes y total, es cosa de niños". Tengo que decirle adiós. Ya no debo esperar, ahora debo coger a los míos, tomar mis obligaciones de la mano y caminar, con fuerza, con decisión. Y si me caigo, no debo esperar a que me levanten, no debo esperar una voz de consuelo, ni una mano que me ayude, no debo esperar nada. Solo debo caminar haciendo mi vida, construyendo mi vida yo sola. Sin maltratarme con la comida. Respetando y valorando a cada uno como es, empezando por mí.
Ayer dije "para" y paré. Hoy he desayunado mi bocadillo y mi leche. Me he ido a pesar, solo Dios sabe lo que me ha costado.
83,3
Teniendo en cuenta que la semana pasada fui en ayunas y con un vestido casi de gasa para que no pesara, y que hoy he ido desayunada y con tejanos cortos y camiseta normal es todo un logro. Si tengo en cuenta la ropa no he cogido peso. Quizás no lo hiciera tan mal. El reto no lo he conseguido, pero sí creo que es merecido. Creo que vale por un conseguido sinceramente.
Así que he decidido que hasta el 24 que habré vuelto de mi semana de merecido descanso en un hotel donde mi máxima preocupacion sea ponerme crema en el cuerpo no voy a pesarme. Y no voy a escribir.
Como el año pasado tomo mis blogvacaciones.
Y me despido de todos vosotros hasta dentro de unos días ... de Chati, que siempre tiene consejos que dar y que son estupendos; de Nenufar, con su juventud y fuerza; de M que nunca desfallece; de David, que nunca nos abandona; de Esther que sin blog siempre está ahí, y de May que siempre nos adorna con su sonrisa, y que hoy por hoy son lo más parecido a unas amigas que tengo; de Montse y Evita que siempre aportan unas ganas de vivir estupendas; a Versus que siempre está ahí apoyando; de mi hermana, que lee aunque no comente y sé que es incondicional para todo; de Gordi que habla poco pero cuando habla sentencia, que grandes tus palabras siempre, tenemos pendiente un café eh. Me despido de mis 66 seguidores, estoy deseando que llegueis a 69, jeje, bonito número. ¿ Veis, de nuevo esperando algo? A veces pienso que nunca cambiaré, pero sí tengo que reconducir mi vida, mis hábitos, mi camino. Porque no puedo dejar que unas ilusiones puedan con mis ganas de vivir.
Se acabó vivir esperando, para empezar a vivir viviendo, que no es poco.
Pues eso, que me voy de vacaciones a seguir viendo mi serie favorita via internessss PERDIDOS. Y a perderme yo en la piscina del hotel, si venis a buscarme por favor, que sea con un refresco en una mano, y muchas ganas de reir en la otra ... estaré en un Meliá, gran hotel donde los haya ....
Felices vacaciones
PROXIMO MELRETO .... 31 DE AGOSTO. NO FALTÉIS.