Y después de la euforia ....

No sé si con esto voy a decepcionar a alguién, no sé si alguien se va a molestar. Lo lamento, lo siento, pero tengo que volver a mi rincón, a mi ladito tranquilo y solitario que me permite hacer de este blog lo que es. Nació con la necesidad de explicar, de desahogarme, de narrar aquello que me angustiaba, buscaba un lugar cálido donde poder volcar mis sentimientos, y me tratasteis tan bien que una cosa llevó a la otra y ahí estaba yo con mis foticos, mi familia, desnudándome ante el mundo, ante vosotros, y con ello ... se perdió la magia. Se fue el anonimato y llegaron las cadenas. Las cadenas del qué dirán, de quién me leerá, de a quién le estoy contando mi vida. Sí, porque mi blog no es un blog de cocina, o de ideas, o de aquello que se imagina, se crea, se propone... no, es un blog de aquello que se vive, y el privilegio de hacerlo desde el anonimato era lo que hacía de este, mi blog, un lugar donde ser yo misma, donde poder expresarme, donde podía decir cómo estaba sin importarme nada más, absolutanmente nada más. ¿El blog de mis peques? Pues eso es de mis peques, y sigue ahí creciendo con ellos hasta que ellos puedan hacer lo que quieran con él. Así es mi vida, por eso llevo un balón, porque paso de la euforia a la depre en segundos, porque donde veia entusiasmo ahora veo niebla. Es simple, necesito estar en un rincón donde veo cómo van las cosas y luego decir la mía que estar en primera linea de fuego. Ya lo he estado mucho tiempo, ya lo tengo que estar en mi vida privada, y este, este es un rinconcito donde poder volcar sin tener que pensar, sin tener que medir lo que digo, sin esfuerzo, y es que estoy muy muy cansada, agotada. ¿Depre? No ahora no, simplemente razono cómo nació este blog, con qué finalidad, y desde luego no era la de presentarme al mundo, y aunque vuestro cariño me animó a hacerlo espero que sepáis disculparme por esta niñería. Pero como ya dije un día, no importa las veces que me caiga sino la fuerza con la que me levanto. En fin, que fuera tristezas, que lo lamento, que me equivoqué, y que ahora vuelvo a ser, no una sombra, sino más bien una sonrisa como la que encabeza el post para deciros : HOLAAAAAAAA HE VUELTOOOOOOO.