Euforia, euforia, euforia, bronca, euforia, euforia ...

Entre foto y foto, entre escote y vestido ajustado, entre emoción y coquetería de vez en cuando también hay nubes y tristezas. Sí las hay, mi vida no ha cambiado hasta el punto de que eso desaparezca, aunque ya me gustaría a mí. Sin embargo, antes una bronca era un gran río desbordado que me arrastraba entre sus ramas, su lodo y su fuerza ... me hundía ... tanto y con tal despropósito que en ocasiones quería como decía yo "dormir para dejar de sentir lo que sentía". Solo quería meterme en la cama y desaparecer ... llega a dudar una tanto de todo, que incluso duda sobre lo que quiere o necesita. Pero eso era antes. Si he aprendido algo con el tema de la comida este tiempo es que no se hace todo perfecto o imperfecto, no se hace una dieta impecable o se fallan todos los días ... no es así. Hay días de todo, y lo importante es conseguir que los malos días vayan siendo los menos. Decir que no relaciono mi estado de ánimo con la comida sería mentir. Decir que no hay momentos en los que como, como y como ( nada extraordinadio pero sí cuantioso a estas alguras de mi manera de comer ). Lo que me jode es que recupero en un día, lo que he tardado una semana en perder, y eso me da un coraje... Así que he hecho el propósito de ser fuerte y de que cuando las tormentas vengan a mi vida no permita que me arrastren ni un poquito hacia la comida, una puede estar triste, decepcionada o hundida. Pero eso no significa que pueda comer hasta saciarme. No. Porque será echar para atrás mucho esfuerzo, mucho logro conseguido. Hoy me la he cargado, hoy he echado al traste toda la semana de logros, pero no pasa nada, hay que seguir adelante, ¿me cai? pues nada, arriba, con alegría ... ¿ Tengo problemas ? ¿y quién no los tiene ? No dramatizo, mi vena histérica se fue con mis quilos ( A Dios gracias En fin, feliz semana que ya pronto está la primavera aquí ... flores, sol, empieza el calor ... qué me gusta ... Y yo nerviosa por mi "escapada" de mañana ... sola en el mundo, umm y con este frío... no sé qué va a ser de mí, jejeje